Como seguimos sin poder actualizar el blog con fotos, lo haremos de esta rudimentaria manera
El tercer dia en Beijing nos tocaba madrugar para visitar primero el mercado fantasma en el que vimos todo tipo de antiguedades pero que no tuvo demasiado exito con nosotros por lo que decidimos no perder mas tiempo en el y dirigirnos al templo del cielo, la verdad es que es chulo, un bonito palacio circular, algo novedoso ya que casi todos los demas templos son rectangulares, jejeje, y allí se peleaban por subirse a una absurda piedra que dicen es el lugar mas sagrado de China... despues de unas horitas caminando decidimos pararnos en un restaurante no demasiado bonito pero que parecia barato y con la comida china tipica, esto es, pollo con anacardos (que no con almendras) y unas verdurillas.
Ya por la tarde, y para no perder la costumbre de los mercados nos fuimos al mercado de las perlas, y aunque os sorprenda, no solo venden perlas, sino que venden todo tipo de cosas destacando el mercado de la electronica, cualquier cosa que quieras ahi la encontraras, ipods, moviles, ebooks, portatiles..... de todo y calcado a los originales, si bien la calidad de las mismas despierta dudas entre los compradores, ya veremos al llegar a casa como funcionan nuestras adquisiciones.
Ya por la tarde noche, un tanto agotados decidimos volvernos al hostal y descansar ya que el dia siguiente se presentaba como uno de los mas duros
El cuarto dia en la capital china nos esperaba la famosa Ciudad Prohibida, la cual nos parecio grande y bonita, pero no espectacular, sino agotadora, palacios palacios y mas palacios, unos mas grandes que otros, todos rectangulares y en ninguno se podia entrar, no se lo montan demasiado bien estos chinos, y mira que son muchos eh,en fin, que salimos de la ciudad prohibida para pasear por la ciudad de los lagos, algo mas relajante y bonito que ver, lleno de nenufares y con barquitas para pasear, aunque no hicimos uso de las mismas, sino que nos tomamos un buen helado bien quietecitos.
Para comer fuimos al que mejor pinta nos tenia de la zona, y pedimos un arroz con pollo y setas, aunque tenia mejor pinta de lo que realmente sabia y el pollo brillaba por su ausencia, raro en estos chinos.....ya por la tarde aprovechamos para visitar la torre del tambor y la torre de la campana, aunque decidimos no entrar, puesto que viendolo desde fuera no es que nos entraran unas ganas locas de ir, y asi nos reservamos para entrar en el templo de los Lamas, de estilo Tibetano, y que tenia un buda gigantesco de unos 20 metros de altura
Ya nos tocaba ir al hostal y descansar para el quinto y definitivo dia en la capital
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